jueves, 6 de febrero de 2014

Gravity (2013, Alfonso Cuarón - especial Oscars)

La introspectiva odisea al espacio

ATENCIÓN: LA SIGUIENTE NOTA ESTÁ MUY MAL REDACTADA. ÉPOCA DE EXÁMENES. QUEDAN ADVERTIDOS. 

Ser parte de la historia significa tener una muy grande que contar. Una buena historia vendría hacer del tipo que tenga algún evento excepcional  y que, además, deje una moraleja picando sobre el final. Por eso, dicen los sabelotodos, que la única manera de hacer historia es saliéndose de la famosa "zona de confort" (de la que tantos guionistas han estado hablando últimamente). Los primeros minutos de Gravedad nos muestran a la doctora Ryan Stone (Sandra Bullock) en su primera misión como astronauta. Que sea novata, no significa que Ryan sea joven; por el contrario, está entrada en sus cuarenta y aún así tomó la decisión de subir al espacio para iniciar una investigación (honestamente, no presté atención sobre qué). El teniente Matt Kowalksy (Clooney) ha colocado su ojo de veterano sobre ella y el resto de la tripulación, lo que no le impide mostrarse distendido, mientras le cuenta a la doctora y a los demás, una serie de relatos anecdóticos que le ocurrieron durante sus años como teniente.

En ese momento, sucede algo probable pero aún así, intempestivo: desde la base, Houston les comenta que los rusos se deshicieron de un satélite haciéndolo estallar en el espacio. El saldo es desfavorable para el grupo norteamericano ya que los restos del satélite viajan velozmente hacia ellos e impactan con violencia contra la tripulación, dejando a Kowalsky y Stone a la deriva, en la inconmensurable inmensidad del espacio. En el vacío y soledad más completa que jamás podría existir y entre una distancia que -indudablemente- existe entre los dos.

jueves, 30 de enero de 2014

Her (2013, Spike Jonze - especial Oscars)

 "A veces pienso que ya sentí todo lo que iba a sentir.
Y que de ahora en más, no voy a sentir nada nuevo.  
Solo versiones menores de lo que ya he sentido."
 

Ella, es la voz más bella

Ya no sabe a dónde llegar, por eso camina. De la casa al trabajo y del trabajo a la casa. Sale de la oficina, entra al ascensor, camina hasta el tren, lo toma, sube a otro ascensor y llega a un departamento. Nadie le habló en el trayecto y no hay nadie a donde quiera que vaya. Sólo está el mismo telón de fondo, esa voz automática y desalmada que, desde su celular, le anuncia la basura que le llega al correo. Después nadie. El mundo para Theodore es tan vacío y automático como aquella voz en serie. Y dudosamente se pueda contradecirle aquella visión de su realidad, si tenemos en cuenta que su esposa se divorció de él y su trabajo es escribir cartas de amor para otras personas que dicen estar enamoradas pero no tienen palabras para expresarlo.

Theodore transita en una existencia solitaria donde los seres humanos que le rodean ya han pasado a un segundo plano puesto que le han dejado una desilusión tras otra. Las redes sofisticadas ni siquiera le permiten conectarse con otras personas con las que se vincula mediante salas de chats, pretendiendo tener sexo verbal. El contacto, la corporalidad o materia de una relación se han perdido en el mundo de Spike Jonze y, sorpresivamente, no parecieran tener importancia. Por eso, no es de llamar la atención que cuando Theodore cambia la voz automática de su teléfono por un nuevo sistema operativo con la capacidad de tener una conciencia, se termine enamorando de esa voz que dice llamarse Samantha.

martes, 28 de enero de 2014

Top Of The Lake: mapa de un feminismo claustrofóbico

Top of the Lake | Miniserie (7 capítulos) | 2013 - Australia-Reino Unido  
Dirección: Jane Campion, Garth Davis 
Guión: Jane Campion & Gerard Lee
Cast: Elisabeth Moss, David Wehnam, Peter Mullan, Tomas M. Wright, Holly Hunter, 
ATENCIÓN: Se revelan algunos detalles de la historia

No exagero si expreso que es necesario (re)afilar la perspectiva de mujer para comprender los relatos que Jane Campion ha llevado a la pantalla. En The Piano (1993), relucía el hecho de que Ada, una mujer del siglo XIX que a pesar de ser muda y sometida a un matrimonio arreglado, logró comunicarse a través de su cuerpo, decidir y experimentar la sexualidad sin tabús ni convenciones opresivas del género para aquella época. Los personajes de Campion están más o menos trazados bajo el mismo esquema: se trata de mujeres en apariencia frágil pero de una tenacidad y autonomía inmensurables.

Son contadas las veces en que vale colocarse desde el propio género. De otra manera, sería prácticamente imposible 'legitimar' ciertas actitudes o pensamientos de un personaje. En consecuencia, una mujer sí puede entender a la muda Ada sólo por reconocerse en el rostro de ella de la misma manera que hombres únicamente son capaces de entender a Charlie o Alan Harper de Two and a Half Man. Por eso Top of The Lake (2013) no tiene necesidad de ser sometida a un análisis desde su aspecto "thriller estilo twin peaks" porque sí así lo hiciéramos, estaríamos cometiendo un gran error al juzgar el costado más débil y menos explotado por su autora. El su relato, Jane Campion  realiza una radiografía completa de la mujer dentro de un pequeño pueblo neozelandés.

domingo, 26 de enero de 2014

Dragon Ball Z, La Batalla de los Dioses

 "Over nine thousand" de cal y una de arena

Desde que hace un par de años atrás Dragon Ball Z se remasterizó en Dragon Ball Kai y los capítulos rellenos suprimidos, era evidente que luego de 20 años los clásicos llevan ese adjetivo porque los define: inagotables, religiosas, reciclables y -en consecuencia- siempre redituables. Después de 2 décadas, tanto Dragon Ball como Sailor Moon confirmaron que regresarían aunque en maneras diferentes. El éxito mundial de las dos series y la millonaria recaudación que hicieron a lo largo y a lo ancho del globo les trajo a sus creadores problemas en contrapartida. El ánimo de lucro de los estudios de animación derivaron en la creación de la detestable Dragon Ball GT y, tiempo más tarde, un live action yankee con grandes sumas de dinero invertido y fracasos cosechados que generaron gran malestar en Toriyama. No fue muy distinto para Naoko Takeuchi, la creadora de las marineras de la luna. Tiempo después, la tímida dibujante manifestó su descontento con la censura y el abuso de los estudios que llevaron a la tv las aventuras de las scouts. Ella se volcó a un live action que causó más risas que recibimientos serios y los proyectos de reciclar clásicos se truncaron en ambos casos. 

Sin embargo, los aniversarios de clásicos legendarios que han creado fanatismos religiosos son eventos favorables para retornar a contar historias de personajes arraigados en las emociones infantiles que todos (T-O-D-O-S) llevamos dentro y, en el caso de sus creadores, de seguir actualizando sus cuentas bancarias. Por eso, Sailor Moon retorna en julio de la mano de nuevos productores y nuevo estudio de animación que se comprometió a representar el manga tal como es (uncensored). La misma fortuna corrió para el regreso de Dragon Ball Z con La Batalla de los Dioses, una película con la que Akira Toriyama burla a los animadores de la serie en el pasado, pero también a sus legiones de fanáticos.

sábado, 25 de enero de 2014

La película de la semana: Tokyo Family (Yôji Yamada)


Uno de los recuerdos que tengo cuando me fui a estudiar es una llamada telefónica de mi mamá. Fue diferente porque jamás me llama. Es una mujer ahorradora, demasiado para mi gusto. El motivo de la llamada había sido la delgadez y el repentino cambio de humor que observó en la última vez que nos habíamos visto. Desde mi traslado a la ciudad no eran muchas las veces que nos veíamos y cada vez que me abrazada luego de un largo tiempo, me decía que estaba flaca. Lo mismo mi abuela. "¿Comes bien?" repiten hasta el cansancio. Cuando los padres llevan largo tiempo sin ver ni vigilar sobre sus hijos, reconocen que están perdiendo parte de nosotros. Comenzamos a hacer o decir cosas que ya no reconocen. Sufren nuestras mutaciones. Cuando nos ven luego de un largo tiempo, ven lo inevitable, el perdernos y ya no legislar sobre nuestras vidas. Ven el cambio "insalvable" de sus hijos.

Tokyo Family cuenta el viaje de Shukichi y Tomiko desde una pequeña isla hacia la gran Tokyo. La pareja de septuagenarios viaja una semana para que Shukichi le de las condolencias a la familia de un viejo amigo que acaba de fallecer. Ese es el motivo superficial, porque en realidad, lo que anhelan hacer es reencontrarse con sus hijos ya crecidos: Koichi, el varón mayor y médico de la familia;  Shigeko la única hija mujer y Shuji, el hijo mejor de la familia. El encuentro de los padres con sus hijos produce en ellos un sabor agridulce. Por un lado está su alegría por encontrarse con sus hijos, pero por el otro, está la tristeza y el desconcierto ya que cada uno se ha acoplado al ritmo frenético de la gran ciudad y, a pesar de las diferentes elecciones de vida que mantienen, sus hijos no han guardado un espacio para ellos.

Dallas Buyers Club (2013, Jean-Marc Vallée · especial Oscars)

El rodeo de la vida

Desde el principio, Dallas Buyers Club ha sido problemática. Fue escasamente financiada y durante un buen tiempo el rodaje estuvo detenido debido a la imposibilidad de afrontar costos para su continuidad. No obstante la película pudo terminarse y, ahora, el nuevo problema que enfrentarán los creadores de la película es su nominación al Oscar y el título que decidan ponerle los distribuidores a la película en Latinoamérica.

No estamos en presencia de una película ganadora, sino frente a una pequeña historia sobre el sida, la discriminación y las redenciones de un hombre que tiene que alterar su manera de vivir si quiere seguir adelante. Dallas Buyers Club es una cinta que únicamente será reconocida y recordada por su mensaje y, en mayor medida, por el compromiso actoral de Matthew McConaughey y Jared Letto.

jueves, 23 de enero de 2014

Escándalo Americano (David O'Russel ·especial Oscars)


Mentime que no me gusta

La primera escena de Escándalo Americano nos muestra a Iriving Rosenfeld (Christian Bale) colocándose metódicamente un peluquín para cubrir su calvicie asimétrica. En la habitación siguiente de un hotel se encuentra con Richie Dimaso y Sydney Prosser. Irving discute con Richie y a raíz de esa pelea, Richie le desarma el peluquín a su compañero estafador. Sydney se enoja con Richie y rápidamente se acerca a Iriving y le acaricia el cabello, intentándo colocarlo todo en su debido lugar. Sydney no espera que Irving se acomode el cabello solo. Ella lo hace por él, sabe que odia que lo desarmen. Sabe que detesta que tiren abajo su fachada.